Los analistas internacionales señalan que el apellido Menem está ligado a la historia
de los últimos cincuenta años de la Argentina. Los Menem actuales, son Martín y
Lule, siendo este último, – un amigo personal del Presidente Milei y mano derecha
de Karina Milei – protagonista de un escándalo que remece al país trasandino. Se
trata de una presunta corrupción, en la Agencia Nacional de Discapacidad, en la
cual se señala a la mano derecha de Karina Milei recibiendo una importante coima
de una empresa farmacéutica.
Este episodio, que está siendo explotado al máximo por el justicialismo peronista,
marca negativamente la gestión de un gobierno que llegó al poder para,
precisamente, terminar con la corrupción, un flagelo que parece ser una normalidad
en Argentina.
Este caso de corrupción, que ha sido negado por el gobierno de Milei, podría afectar
al Partido Libertario, en las próximas elecciones de octubre. El caso además viene a
afectar una gestión económica exitosa que bajo la inflación, disminuyó la pobreza,
estabilizó el precio del dólar,
El caso de corrupción, de confirmarse por los tribunales, daría un argumento
poderoso a los peronistas y a la ex Presidenta Fernández, para atacar al gobierno
de Milei, en la base de su discurso anticasta, anticorrupción y generaría además, un
quiebre en sus partidarios, difícil de recomponer.
El Presidente Milei, debe actuar con rapidez para – de comprobarse la denuncia –
apartar del gobierno a los culpables y denunciarlos ante la justicia,… sean quienes
sean. Hermana incluida. Ya no tiene margen para dudas o discursos dilatorios.








