El Banco Central emitió un Informe de Cuentas Nacionales correspondiente al primer trimestre del año en el cual se establece una contracción del producto de solo un 0,6%, cifra que resulta menor al estimado por diversos analistas económicos. Estos analistas habían pronosticado una caída del producto de un 0,9%.
La demanda interna se redujo en un 8,0%, como consecuencia de una menor inversión y un menor consumo de los hogares. Las exportaciones netas aumentaron, “producto de un aumento de las exportaciones y una caída de las importaciones”, según el Informe citado. El comercio y el sector agropecuario fueron los que presentaron una mayor incidencia a la baja. Los servicios personales fueron la principal contribución al alza.
El Informe señala que “la inversión fue incidida principalmente por una menor acumulación de existencias, las que alcanzaron un ratio acumulado en doce meses de -0,6% del PIB, a precios del año anterior. Asimismo, la formación bruta de capital fijo cayó 2,1% reflejo, principalmente, de la inversión en maquinaria y equipo”.
El Informe establece también que “El consumo de los hogares presentó una caída de 6,7%, destacando la disminución del gasto en bienes no durables. Respecto del comercio exterior de bienes y servicios, las exportaciones aumentaron 2,4% y las importaciones cayeron 17,4%”.