Las elecciones primarias, demostraron una vez más, que cuando la Democracia
Cristiana celebra un pacto con el oficialismo, lejos de obtener un buen resultado,
sigue perdiendo su caudal electoral.

Y en estas elecciones primarias, ocurrió lo anterior. La DC volvió a perder fuerza
electoral. En efecto, el partido de la flecha roja postuló con sus candidatos en 19
comunas de las 45 comunas en que se realizaron elecciones primarias. Perdió en
16 de ellas. La derrota más emblemática, fue en la comuna de Peñalolén, donde la
candidata DC perdió frente a un candidato del Frente Amplio.
Los actuales dirigentes de la DC, encabezados por el diputado Alberto Undurraga
no pueden entender que el electorado que vota por este partido es básicamente
centrista y que incluso no quiere saber nada con la extrema izquierda que hoy
gobierna en el país.
En las elecciones primarias, la DC solo logró retener una de las comunas
importantes, claves para el partido: la comuna de La Granja. Y solo ganó en las
comunas de Penco y Pitrufquen.
Este fracaso puede estar anticipando un resultado desastroso para el partido, en
las próximas elecciones municipales de octubre. La alianza con la izquierda
oficialista está hundiendo electoralmente a la DC que en su época logró grandes
resultados, cuando se presentaba como una alternativa a la izquierda.