En su intervención en la Asamblea General de la ONU, el presidente Gabriel Boric
presentó la postulación de la ex Presidenta Bachelet al cargo de Secretaría
General del organismo internacional.
Nuevamente, al igual como lo hiciera en el caso de la fallida compra por parte del
estado de la casa del ex Presidente allende, el mandatario se dejó llevar por un
irrefrenable voluntarismo para presentar la postulación de Bachelet.
La citada decisión del mandatario se hizo sin consulta con los partidos de
gobierno, mucho menos con los principales partidos de la oposición. Tampoco se
hizo una consulta con los candidatos presidenciales. Tampoco se consultó a los ex
ministros de Relaciones exteriores. Fue, pues, una decisión personal del señor
presidente.
Mirada así la situación creado por el mandatario, corresponde señalar que
Michelle Bachelet no tiene un apoyo importante del mundo político y en general de
la ciudadanía. Su segundo gobierno, el de la Nueva Mayoría, terminó con un bajo
nivel de apoyo popular, la incorporación de militantes comunistas a importantes
cargos de su gobierno, tampoco fue bien vista por personeros de centro izquierda
que apoyaban su gobierno; su apoyo a al primer intento de reforma de la
Constitución, tampoco fue bien visto por una mayoría de la gente que – sabido es
– terminó rechazando por amplia mayoría ese intento de refundar el país; tampoco
ha sido bien recibido su reiterado silencio para condenar las dictaduras
comunistas de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Millones de chilenos, ven en ella
una figura representativa de la desunión que causaron en el país, sus políticas de
gobierno.
Así las cosas, Bachelet, queramos o no, es un personaje controvertido, que no
suscita el apoyo interno requerido por quien postula al alto cargo de Secretaria
General de la ONU.
El voluntarismo del presidente Boric olvidó también que correspondera al próximo
gobierno, de Kast o Matthei – según las principales encuestas – resolver si hace o
no campaña por esta candidatura inconsulta y prematura, que ni siquiera fue
consultada con los gobiernos de los otros países que integran el organismo
internacional,…consulta que es indispensable para calibrar las reales posibilidades
de la candidatura de Bachelet.
Además, hay que señalar que Bachelet no es una persona grata para millones de
chilenos que ven en ella una figura representativa de la desunión que causaron en
el país, sus políticas de gobierno.








