El proyecto de Ley corta de Isapres fue aprobado por el Congreso por una
amplia mayoría. Tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, el
informe de la comisión mixta fue aprobado por una amplia mayoría.
Sin embargo, en los días previos, muchos parlamentarios oficialistas
contrarios al proyecto de Ley habían anunciado su rechazo a la propuesta
diseñada por la Ministra Aguilera, de Salud, y su grupo de asesores.
El gobierno sabía que si se rechazaba el proyecto se corría el riesgo de
perder por paliza la próxima elección municipal. Los afiliados a las Isapres,
llegan a las dos millones setecientas mil personas y seiscientos mil son
pacientes con pre existencias. Todos ellos, no hubiesen apoyado a un
gobierno que las dejaría sin cobertura de salud.
Era mucho lo que estaba en juego. Y el gobierno no quería correr el riesgo
de que el proyecto fuera rechazado.
Los parlamentarios contrarios a la Ley, señalaban que no concurrirían con
su voto, al salvataje de las Isapres.
El gobierno desplegó a casi cinco ministros para que hicieran una marcación
directa sobre los parlamentarios oficialistas contrarios a la Ley. El trabajo de
“marcación al hombre” fue encabezado por el Ministro Elizalde y participaron
directamente los ministros Luis Cordero de Justicia y Ximena Aguilera de
Salud. Como una medida adicional, Elizalde solicitó a la Senadora
Vodanovic, Presidenta del Partido Socialista “cuadrar” a la poderosa
bancada senatorial de ese partido. Y Vodanovic cumplió.
La Ley corta, aprobada por el Congreso, permitirá la subsistencia de las
aseguradoras privadas de salud ante el fallo de la Corte Suprema. Estarán
obligadas a restituir a sus afiliados los cobros efectuados por exceso por no
aplicar la tabla única de factores.
