Dirigentes de Centro izquierda, agrupados en la Agrupación Cambio
Democrático, entre ellos Felipe Harboe, Fulvio Rossi, José Joaquín
Brunner, Óscar Garretón, Víctor Rebolledo, Mario Waissbluth e Ingrid
Wegner, han señalado que diversos dirigentes de la opción Apruebo
han incurrido en una reiterada práctica de “intolerancia” en contra de
los sectores de centro izquierda que se han manifestado a favor de la
opción Rechazo a la propuesta de nueva constitución.
La Agrupación Cambio Democrático, que está integrada por
parlamentarios y ex ministros de la ex Concertación y de la ex Nueva
Mayoría acusa a los dirigentes gobiernistas de “quitar certificados de
‘buena conducta’ progresista, a quienes expresen su rechazo” a la
propuesta de la la Convención Constituyente.
Señalan desde Cambio Democrático que “en grupos de izquierdas, se
ha ido asentando la reprobable conducta de otorgar y quitar
certificados de ‘buena conducta’ progresista, destituyendo a quienes
piensen y expresen su rechazo o aprehensiones a un proyecto
constitucional ampliamente reconocido como malo o deficiente, incluso
por algunos de los propios sectores que lo apoyan, y que
recientemente se comprometieron a reformarlo una vez aprobado”.
Los dirigentes del Apruebo han acusado a los sectores de Centro
Izquierda que están por la opción Rechazo, de “traición”, “entregados
al pinochetismo”, ignorando el sagrado derecho a disentir del texto
emanado de una convención constituyente frustrante”,
Señalan los dirigentes de Centro Izquierda que esos ataques “no
corresponde a una izquierda moderna y democrática, que acepta y
valora el pluralismo como bien insustituible de la democracia y que ha
condenado, desde hace muchos años, las prácticas dogmáticas
propias de atroces experiencias, como las purgas del estalinismo o la
persecución a las ideas y acción de la izquierda socialdemócrata y sus
exponentes, tachados históricamente como renegados”.
Los dirigentes de Centro Izquierda señalaron que: “no necesitamos, no
pedimos ni aceptamos certificaciones de nuestro compromiso
progresista, de nuestros anhelos de justicia social, de una sociedad
equitativa y de un país donde no existan odiosas discriminaciones y
desigualdades sociales y culturales”.
Finalmente señalaron que: “Seguiremos participando y fomentando la
idea de una Constitución bien hecha, que otorgue garantías
democráticas e institucionales a todos los sectores de la sociedad, sin
ninguna exclusión entre quienes aceptan plenamente y sin
ambigüedades los requisitos y reglas de la democracia”, concluye.
