La cotización adicional de 6% ira de manera íntegra a un fondo solidario
En el reciente Chile Day en Nueva York – y ante la inquietud de los inversionistas internacionales – el ministro de Hacienda, Mario Marcel, entregó algunos antecedentes sobre el proyecto de reforma previsional que patrocina el Ejecutivo.
La principal novedad del proyecto radica en que la cotización adicional de 6% ira de manera íntegra a un fondo solidario. Este fondo será administrado por una entidad pública y la mitad (3%) irá a “capitalización colectiva”, es decir, ahorro no individual. El resto será para reparto inmediato para mejorar las actuales pensiones. En este esquema solo se garantiza la propiedad y herencia sobre los fondos de capitalización individual del actual 10% y no de la nueva “capitalización colectiva”. Esto revela un cambio importante respecto a lo que se había avanzado en las extensas negociaciones por reformar el sistema de pensiones durante el gobierno anterior, cuando parecía que la fórmula de destinar la mitad del 6% de cotización adicional a ahorro individual y la otra mitad a un fondo colectivo contaba con el acuerdo de la mayoría de las fuerzas políticas.
El Presidente Gabriel Boric señaló que la propuesta hará cambiar el sistema “para mejor” y que la presentación del proyecto se hará una vez se analicen los resultados de los diálogos ciudadanos sobre la materia.
La senadora Ximena Rincón señaló que “Siempre hemos pensado que tiene que haber un sistema mixto, vale decir, un componente de ahorro individual, un componente de aporte estatal y un componente solidario para garantizar un piso mínimo a la ciudadanía”. Agregó que “lo más importante de todo es que nos muestren los números. Y se preguntó: ¿De qué nos sirve hacer este tremendo esfuerzo si es que en 15 o 20 años más las pensiones van a ser igual de malas que las de hoy día? Creo que es muy importante que transparentemos los números y que lo hagamos con expertos”. Manifestó también su preocupación por el contraste entre lo que buscaría el Gobierno y lo que establece la propuesta de nueva Constitución. Señaló que el proyecto de nueva Constitución consagra un sistema único y estatal de pensiones. “Nadie va a poder destinar nada de sus ahorros a otro sistema que no sea ese”, dijo, además de establecer que los recursos con que se financia la seguridad social no podrán ser destinados a fines distintos que los pagos de beneficios que establece el sistema. “Yo me pregunto cómo se concilia eso con este proyecto del 6% adicional a un fondo común y un 10% que está yendo a capitalización individual.
El diputado Juan Santana (PS) señaló por su parte: “el aspecto más relevante es que se introducirá con fuerza el principio de la solidaridad, que significará la incorporación de un aporte del estado y de los empleadores para las futuras pensiones”. “Esa solidaridad se va a traducir, también, en la creación de un componente colectivo que permitirá hacer una redistribución con sentido de justicia social, lo que garantiza aumentar el ingreso de los futuros pensionados. Entiendo que existe desconfianza en la población frente a este tipo de instrumentos, pero hay experiencia comparada y es exitosa”.
El senador Francisco Chahuán (RN), señaló que “frente a este nuevo intento del Ejecutivo de que el 6% aporte previsional extraordinario de cargo del empleador vaya solo a solidaridad intra e inter generacional es un completo error, ya tenemos un proyecto que ha alcanzado consensos necesarios, pasó la valla de la Cámara de Diputados y de la comisión de Trabajo y por tanto debiera ponerse en discusión a la brevedad posible”. David Bravo, director del Centro UC de encuestas y Estudios Longitudinales, sostuvo que se debe “justificar muy bien por qué se requiere la adición del componente colectivo, tanto en su dimensión de reparto como en su formato de capitalización”. “Será necesario justificar muy bien por qué es fundamental crear una nueva institucionalidad para la capitalización y determinar cómo van a ejercer sus derechos de elección las personas que tienen cerca de US$170 mil millones en sus cuentas individuales”. Salvador Valdés, de la U. Adolfo Ibáñez valoró la función de las AFP, especialmente en la administración de cuentas y beneficios y gestión de inversiones, recordando su rol en los pasados retiros del 10%. En tanto, afirmó que la administración pública exhibe un “pésimo servicio”, dando como ejemplo que el Instituto de Previsión Social (IPS) demora más de nueve meses en procesar una pensión. Sobre el 6% de cotización adicional con cargo al empleador a un fondo colectivo, expuso que “la respuesta del mundo del trabajo será la de siempre: más informalidad y más subcontratación para evadir, lo que elevará las interrupciones de cotización y las pensiones contributivas disminuirán otro tanto”.